Partimos de leer la siguiente noticia: Ortega Cano pide su absolución....
Justicia, justicia y justicia. Eso reclama la familia del hombre al que un conductor borracho sesgó la vida sin piedad. Pronto habrá pasado casi un año y sin fecha para el juicio el "matador" sigue en la calle. Ortega Cano una deshonra para el colectivo torero, que se las dan de hombres valientes, pero que en realidad no son capaces de asumir la repercusión de sus actos.
El matador de toros y de personas debe pagar como cualquier ciudadano de a pie, pedimos justicia en el caso Urdangarin y pedimos justicia por la muerte de un hombre de familia que se desplazaba para trabajar y que un conductor borracho ( tenía 1,26 gramos de alcohol por litro de sangre, estando el máximo permitido en 0,50), sin compasión por la vida de los demás, se llevó por delante dejando a una familia destrozada de por vida.
Cabe decir que me dio pena que en su día este homicida saliera del hospital ovacionado por un grupo de aficionados a los toros que no distinguen una vida de otra. Acto calificado de deplorable por la Asociacion de Victimas de Accidentes. Aqui
Acusado por homicidio imprudente, por conducción temeraria y por circular bajo los efectos del alcohol, espero que se pase unos cuantos años (mejor el resto de sus días) en la cárcel, como cualquier otro ciudadano que hubiera incumplido todas esas leyes. Seguramente, de ser pobre estaría en la cárcel desde el primer día, basta de indultos y tratos de preferencia a los ricos de este país.
